Jabón para manos y cuerpo: Sevilla
El perfume
Cada uno tiene una idea diferente de cómo debe oler una barbería, pero históricamente tendemos a inclinarnos por este tipo de cosas. Giovanni Maria Farina creó la primera agua de colonia a principios del siglo XVIII y fue un éxito instantáneo. Su fórmula fue apreciada en las cortes reales y gozaba de tal prestigio que todavía se produce en la actualidad. Como resultado de esta popularidad, las fragancias de agua de colonia han sido productos básicos en las barberías europeas durante más de cien años.
Si bien no pretendemos tener tanto talento como Signor Farina, nuestro aroma a Sevilla definitivamente es único en su clase. Afectuosamente apodada "la barbería de Dios" por algunos de nuestros clientes más poéticos, Sevilla es una mezcla de limón, bergamota, romero, lavanda, pachulí y musgo de roble. El nombre proviene de la famosa ópera El barbero de Sevilla , pero el aroma se siente como en casa en cualquier lugar. Darle una oportunidad; no te decepcionarás.
Peso neto. 4,75 onzas, fabricado en EE. UU.
El jabon
A veces no hay nada tan reconfortante como un buen jabón en barra a la antigua. Tyler Durden lo llamó "el criterio de la civilización" y durante mucho tiempo ha estado en la carrera por ser el desarrollo médico más importante de todos los tiempos. Es seguro decir que no habríamos llegado tan lejos como especie si no fuera por la invención del jabón en Sumeria hace miles de años.
Si bien creemos en la simplicidad, sabemos que a muchas personas no les gusta el jabón elaborado con grasas animales. Por lo tanto, estamos encantados de presentar nuestra nueva barra de jabón vegetal, elaborado con aceite de palma de origen certificado, aceite de orujo de oliva y aceite de aguacate de origen responsable, manteca de cupuaçu humectante y leche de cabra en polvo para obtener un jabón nutritivo e hidratante ideal para en cualquier época del año, pero especialmente durante los meses más fríos y secos.
Ingredientes
Aceite de palma de origen responsable, agua, aceite de coco, orujo de aceite de oliva, hidróxido de sodio*, aceite de aguacate, glicerina, aceite de ricino, manteca de cupuazú, lactato de sodio, fragancia, isomerato de sacárido, leche de cabra en polvo
*No queda nada en el producto final.